miércoles, 10 de marzo de 2010

El libro electrónico o E-book


El libro electrónico es una de esas cosas que he decidido odiar sin informarme antes de sus bondades y ventajas. Seguramente, de no haber sido por este blog y la clase de tecnología, no le habría dado ni esta primera oportunidad. Y es que a pesar de pertenecer a esa generación de nativos digitales, aun tengo muy arraigada la necesidad de pasar las hojas con los dedos y el romanticismo de oler las páginas, sobarlas y doblarlas a mi antojo. A pesar de mis prejuicios he hecho un esfuerzo, la búsqueda ha dado sus frutos y creo haber aclarado al menos los términos básicos.

En primer lugar y pese a que genéricamente conocemos por Libro Digital o E-book tanto al soporte como al contenido, lo más correcto es referirse al contenido como tal. Es decir, que un libro electrónico es precisamente eso: la versión electrónica de un libro concreto. Por otra parte está el dispositivo usado para leer estos e-books. Precisamente hablamos de dispositivos ya que pueden aplicarse a PCs, móviles o agendas electrónicas y no únicamente a los soportes destinados únicamente a la lectura de libros digitales.

Sin embargo son éstos los que en los últimos tiempos han alcanzado mayor protagonismo. Y eso que su historia se remonta ni más ni menos que a los años 70, aunque esta primera andadura resultó un total fracaso. El caso es que con el tiempo la técnica ha mejorado y hasta yo tengo que reconocer las ventajas que ofrecen: desde la posibilidad de adquirir libros rápidamente a través de la red y archivarlos sin apenas coste de espacio o su fácil portabilidad, hasta temás de medio ambiente como la reducción de la fabricación de papel.

Lo cierto es que lo que más me echaba para atrás es el hecho de tener que leer una pantalla, algo que me resulta molesto pasado un cierto tiempo. Pero hasta eso ha mejorado al parecer gracias a la tinta electrónica. partículas esféricas que se cuentan por millones y que se cargan eléctricamente. Algo así como una malla compuesta por millones de pequeñas esferas cargadas eléctricamente. Funcionan a través que pequeñas corrientes que hacen variar su tonalidad, haciendo que se formen imágenes que van conformando las letras.

Al parecer este proceso hace de la lectura un acto mucho mas agradable para la vista y además ahorra energía, ya que una vez cargadda la página, esta no debe mantenerse consumiendo electricidad. Pero no todo son ventajas, evidentemente.

Como ocurre con el rsto de tecnologías incipientes, el libro elctrónico se actualiza muy a menudo. Es decir, que lo que hoy es nuevo mañana queda sobrepasado pero una nueva tecnología mucho más desarrollada y que ofrece más prestaciones que la anterior. Por otra parte, y también relacionado con la novedad del producto, no todos los libros del mercado cuentan con una versión digital.

Eso sin contar con las implicaciones estéticas. Un libro es mucho más que palabras, a veces su soporte dice mucho sobre la propia historia, algo que se perdería en el formato digital. Hablándo de pérdidas, la durabilidad del e-book es mucho menor que la de un libro en papel y la posibilidad de que el dispositivo se pierda, rompa, estropee o lo robe es mucho mayor.

No voy a entrar en los implicaciones legales que seplantean con respecto a las copias que podrían inflingir los derechos de autor, porque ese tema da de sí como para escribir otra entrada y más,pero una cosa es innegable: es el futuro. Le pese a quien le pese y nos cueste lo que nos cueste adaptarnosa ello. Por eso he decidido dar una oportunidad al asunto e informarme de las distintas opciones disponibles en el mercado y de cuales son sus prestaciones.
En principio me ha sorprendido el amplio mercado que existe y el gran número de empresas que han desarrollado dispositivos. El que ya conocía y el que parece tanto favorito como lider de ventas es el Kindle de Amazón, a primera vista resulta agradable y muy parecido a un iPod, sin embargo parace contar con ciertas carencias que supera su compedtidor: el Nook de Barnes & Nobles. Tiene un hardware mejor, posibilidad e ampliar la memoria, dos pantallitas y wifi para comprar directamente los lirbos, vamos, una joya. Y cerrando el Top 3, el Sony Reader Touch Edition, más grande, más caro y táctil, algo que me resulta muy interesante ya que se acerca a ese sentimiento al que a muchos nos cuesta renunciar: el manoseo del libro.

5 comentarios:

  1. Enhorabuena por tu post. A mi me pasó lo mismo en un primer momento: nada de libro electrónico. Sin embargo la rapidez y comodidad de comprar libros es tentadora. Cada día pienso más que el verdadero fin de las tecnologías de la información es hacernos más sedentarios...
    De todas maneras, una estantería abarrotada de libros produce un placer incomparable a 2 gigas de textos.
    Un saludo!

    ResponderEliminar
  2. Pues yo me niego a leer libros de una pantallita, bastante tiempo estamos delante de la tele o el ordenador

    ResponderEliminar
  3. Yo todavía no me veo capaz de sustituir al papel así como así, de todas formas las tecnologías mandan, y aún más las empresas. Ya no hay quien pare ésto, pero me mantengo en mis trece, a pasar página, pero de libros de papel.

    ResponderEliminar
  4. Sí, tienes razón, a mí también me encanta pasar las hojas y eso.

    ResponderEliminar
  5. Yo no me inclino por nada porque al principio me negaba a estar más de media hora delante del ordenador y ahora...no os diré cuanto es el tiempo que paso aquí.
    Creo que terminaremos leyendo o enseñando a leer en un aparatito de estos.
    Un saludo.

    ResponderEliminar